Guía para reuniones
Sobre reuniones efectivas y estimulantes
Insista en hacer todo a través de los "canales oficiales". Nunca permita que se tomen atajos para acelerar las decisiones.
Haga "discursos". Hable con la mayor frecuencia posible, y lo más largo posible. Ilustre sus "puntos" con largas anécdotas y relatos de experiencias personales. No dude nunca en hacer algunos comentarios "fundamentalistas" apropiados.
Cuando sea posible, convierta todos los asuntos en comités de trabajo, para su "estudio y consideración posterior". Intente que los comités sean lo más numerosos posible, nunca menos de cinco personas.
Plantee asuntos irrelevantes con la mayor frecuencia posible.
Negocie sobre la redacción exacta de las comunicaciones, actas y resoluciones.
Hable de los acuerdos de la última reunión e intente reabrir la discusión planteando la pregunta de cuán conveniente fue esa decisión.
Abogue por la "prudencia". Sea "razonable" e inste a sus compañeros de reunión a ser "razonables" y a evitar precipitaciones que puedan dar lugar a situaciones embarazosas o dificultades posteriores.
Esté siempre preocupado por la conveniencia de cualquier decisión: plantee la cuestión de si la acción contemplada entra dentro de la jurisdicción del grupo o si podría entrar en conflicto con la política de algún escalón superior.
